La presión fiscal es una de las principales preocupaciones para muchos ciudadanos y empresas en España. Este término hace referencia al peso que los impuestos tienen sobre la economía de una persona o entidad, un tema recurrente en nuestro país debido a las altas cargas tributarias en comparación con otros países europeos. Aunque «escapar» de esta presión no implica evadir impuestos, sí es posible optimizar el cumplimiento fiscal para reducir el impacto de las obligaciones tributarias. A continuación, te contamos 7 estrategias legales para aliviar la presión fiscal en España.
Aprovecha deducciones y beneficios fiscales
Es importante conocer las deducciones y beneficios fiscales que ofrece el sistema tributario español, ya que estas pueden reducir significativamente la carga impositiva sobre tu empresa.
- Deducciones por vivienda habitual: si adquiriste tu vivienda antes de 2013, puedes deducir hasta un 15% de las cantidades invertidas en su compra.
- Inversiones en I+D+i: la inversión en investigación y desarrollo te permite acceder a deducciones en el Impuesto de Sociedades.
- Aportaciones a planes de pensiones: las aportaciones a planes de pensiones te permiten deducir hasta 1.500 euros anuales en la declaración del IRPF.
Haz una buena planificación fiscal
Analizar tus ingresos, gastos y activos permite minimizar la carga tributaria, ya que supone estructurar estos datos para que cumplan la normativa fiscal, pero reduciendo su impacto en la compañía.
- Aplazamiento de pagos: fraccionar o aplazar el pago de impuestos es una opción para mejorar el flujo de caja. Para ello, es necesario negociar con la Agencia Tributaria.
- Optimización del régimen fiscal: conocer los regímenes fiscales específicos es importante para beneficiarse de estos, ya sea el Régimen de Consolidación Fiscal para grupos empresariales o el Régimen de Pymes.
Cambia la residencia fiscal
Cambiar la residencia fiscal es una estrategia que reduce la presión fiscal, pero debe hacerse conociendo sus implicaciones y de manera legal. La Agencia Tributaria investigará cualquier irregularidad, así que cumple los requisitos mínimos si te planteas hacerlo.
- Países con fiscalidad más baja: trasladar tu residencia fiscal a países como Portugal o Andorra supone ciertas ventajas fiscales.
- Requisitos legales: hacerlo de manera legal es necesario, por lo que deberás residir al menos 183 días al año en dicho país, además de demostrar vínculos económicos y personales.
Constituye sociedades y estructuras empresariales
La constitución de una sociedad puede ser la solución perfecta para reducir la carga fiscal, pero siempre que se justifique desde el punto de vista económico.
- Sociedades Limitadas: las empresas tributan a través del Impuesto de Sociedades, que tiene un tipo fijo (generalmente del 25%), lo que puede ser más ventajoso que el IRPF para autónomos con ingresos elevados.
- Holding empresarial: crear una estructura de holding permite optimizar la tributación de beneficios y dividendos entre las diferentes empresas del grupo.
Expande tu negocio a mercados internacionales
Expandir tu negocio a mercados internacionales puede ofrecer beneficios fiscales adicionales, además de nuevas oportunidades comerciales. En el caso de tomar esta decisión, la internacionalización debe ser real y no una simulación para evadir impuestos.
- Zonas de baja tributación: algunas jurisdicciones, como Irlanda o Luxemburgo, ofrecen ventajas fiscales para empresas que establecen allí su sede.
- Exportaciones: Las operaciones internacionales, en muchos casos, están exentas de IVA en España.
Controla los posibles errores y sanciones
La presión fiscal puede aumentar si cometes errores que generen sanciones. Cumplir correctamente con tus obligaciones tributarias es tan importante como optimizar tus impuestos.
- Asesoramiento profesional: contar con un asesor fiscal te ayudará a evitar errores comunes, como declarar mal los ingresos o no aplicar correctamente las deducciones.
- Revisión periódica: revisa tus declaraciones fiscales para corregir posibles discrepancias antes de que las detecte la Agencia Tributaria.
Invierte en activos fiscales eficientes
Invertir en ciertos activos o sectores puede ofrecer ventajas fiscales, reduciendo la presión impositiva de manera significativa. Para hacerlo de manera eficiente, consulta con expertos que puedan identificar las mejores opciones de inversión según tu perfil financiero.
- Inversiones inmobiliarias: el alquiler de viviendas puede beneficiarse de reducciones en el IRPF, como el 60% de bonificación en rendimientos netos.
- Energías renovables: invertir en proyectos de energías limpias puede abrir la puerta a subvenciones y beneficios fiscales.
La presión fiscal en España puede parecer abrumadora, pero con las estrategias adecuadas es posible reducir su impacto. Desde aprovechar deducciones fiscales hasta planificar la estructura de tus ingresos y activos, existen múltiples formas legales de optimizar tu cumplimiento tributario. Para ello, contar con un asesor especializado es clave, ya que cada situación es única y requiere un análisis detallado. Escapar de la presión fiscal no es evadir impuestos, sino utilizar inteligentemente las herramientas que la normativa pone a disposición. Confía en LABE Abogados para mejorar tu presión financiera.